Santo Domingo, 30 mayo 04 [AlterPresse] --- El El obispo de la diócesis de Barahona, monseñor Rafael Felipe Núñez, resaltó la la unión y la solidaridad por sobre todas cosas que existe entre los pueblos dominicano y haitiano.
Felipe Núnez afirmó que la solidaridad entre los pueblos fronterizos está por encíma de cualquier manifestación de intereses y expresó que la solidaridad dada por los haitianos a los dominicanos durante las primeras horas de la tragedía de Jimaní es un ejemplo de esa relación de amistad que existe entre haitianos y dominicanos.
"Sabemos que entre el pueblo haitiano y el dominicano existe una fraternidad que nadie puede romper", las palabras del obispo de la Diócesis de Barahona.
Indicó que nadie podrá romper y menos dañar esa fraternidad entre ambas naciones, entre ambos pueblos y sostuvo que la relación de amistad y solidaridad son más fuerte cada dia.
El religioso sostuvo que las ayudas que han llegado para la tragedía de Jimaní debe y se tiene que compartida con las comunidades haitianas que también resultaron afectadas por el mal temporal que azotó las dos naciones que comparten la la Isla de Quisqueya, la pasada semana.
"Sabemos que entre el pueblo haitiano y el dominicano existe una fraternidad que nadie puede romper", por lo tanto ante la situación de calamidad hay que compartir, dijo.
Monsenol Rafael Felipe Núñez se mostró partidario que luego de que la relativa calma vaya regresando a Jimaní, las autoridades inicien una investitgacion sobre los hechos y reiteró que aunque no es hora de buscar culpables, debe venir una investigacion seria y responsable sobre todo lo que ha rodeado la tragedía de Jimaní.
Madres de Jimaní no pueden celebrar "Día de las Madres"
Las madres de Jimaní, al Suroeste de la República Dominicana y fronterizo con Haití, no pudieron celebrar su dia y en cambio se dedicaron realizar oraciones, recuperar lo poco que la riada le dejó y ha proyectar una nueva vida, ahora sin los seres queridos que perdieron y con las pocas cosas que han logrado recuperar.
En esta parte de la isla, es tradición celebrar el Dia de las Madres, el último domingo del mes de mayo. Los hijos e hijas, aprovechan la ocasión para hacer obsequios a sus madres, abuelas o a la persona con quien se crio.
Pero en Jimaní, las madres este 30 de mayo, no pudieron recibir sus tradicionales regalos de madre. Son decenas de mujeres/madres que lo perdieron todo. Sus hijos e hijas. Sus esposos y sus propiedades materiales al paso por el pueblo del rio blanco, que nace en Haiti con el nombre de Solier.
Caos en la entrega de ayuda a las familias damnificadas
Aunque la ayuda a las familias afectadas por el desbordamiento del rio en Jimaní ha fluido más rapida de lo que se esperaba, el caos se ha apoderado en la entrega de las raciones alimenticias y las ropas y calzados.
Sim embargo, las organizaciones religiosas y comunitarias, además de las entidades No gubernamentales que han acudido a la zona de desastre.
En Jimaní pronto se comenzarán a reparar las viviendas y se construirán otras en lugares no vulnerables, afirmaron las autoridades oficiales en colaboracion con instituciones nacionales y extranjeras.
Sin embargo, el dolor y la frustración de los residentes en Jimaní persiste. Cientos de familias comienzan a confrontar problemas sanitarios. Las autoridades han tendido un cordon de salubridad a fin de evitar la propagación de enfermedades en la zona.
"Nadie es una isla completo en si mismo; cada hombre es un pedazo del continente, una parte de la tierra; si el mar se lleva una porción de tierra, toda Europa queda disminuida, como si fuera un promontorio, o la casa de uno de tus amigos, o la tuya propia; la muerte de cualquier hombre me disminuye, porque estoy ligado a la humanidad; y por consiguiente, nunca preguntes por quién doblan las campanas; doblan por ti." [jls apr 30/05/2004 18:23]